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Este mediodía, al cubrir un evento de índole policíaca al interior del Centro de Documentación (edificio público), un fotógrafo fue agredido verbalmente y físicamente por un agente ministerial, por lo que el reportero de dicho medio lo encaró e increpó su altanera actitud.
Ambos afectados pertenecen a la empresa el Sol de Parral.
De manera simultánea, cuando el reportero policiaco de El Monitor de Parral que intentaba tomar unas fotos a raíz del hecho, de igual forma recibió agresiones físicas y verbales por parte del mismo agente.
Este tipo de actitudes contraponen el supuesto acercamiento del fiscal general del estado y sus subordinados con los medios de comunicación, ya que parece tomar mayor arraigo entre quienes se supone deben procurar la justicia, llegando ya a niveles muy serios debido a que ya existe agresión verbal y física contra el gremio periodístico.
Cabe señalar que recientemente, la propia fiscalía dotó a los reporteros de un gafete que los acredita como quienes cubren la fuente policiaca, y el cual supuestamente permitiría a los reporteros tener mejor acceso a la información, lo cual resultó ser totalmente falso.
Con ello se denigra aún más, la imagen que la sociedad tiene de sus autoridades, y de la falta de confianza en ellas debido a los pocos resultados que presentan, no obstante, por fortuna no se trata de la generalidad de los agentes, sino de algunos que seguramente no son de la ciudad y que tratan de limitar a su manera el derecho de informar a quienes ejercen día con la día la libertad de expresión en nuestra ciudad.
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